Las ventajas históricas en apertura comercial, costos de producción y ventanas de exportación de Chile se han ido perdiendo, lo que junto con el volumen a exportar por competidores, generarán mayor presión en el entorno competitivo.
Las condiciones favorables de Chile nos han permitido un crecimiento sostenido de la superficie agrícola, convirtiendo al sector en un motor de desarrollo económico y consolidándonos como un referente mundial. Sin embargo, algunas especies podrían estar en riesgo por la pérdida de competitividad frutícola en Chile.
Uno de los temas fundamentales es el valor de la mano de obra que en países como Perú y Argentina son bastante menores – comparado con Chile – además de que nuestros competidores estarían mejor posicionados que Chile en cuanto a aranceles.